Voy a dar carpetazo a mis afectos
tragándolos metódica y concisa,
y como es traidor el que no avisa
he avisado a los vivos y los muertos.
Basta digo, me quiero enfurecida,
el presente me apremia con apuro,
dejo atrás aquéllo que suturo:
-el mismo punto de la misma herida-,
no quiero demorarme, tengo prisa,
anduve eternamente con la carga
del trago duro, de la mueca amarga,
del trueque de "tesoro por sonrisa".
Las cuentas de colores para el gato,
no me deslumbran ya, viví engañada
por su brillo de plástico barato.
Por fin soy una alumna aventajada.
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