Madre mía, pues no he sacado veces a rugir y a afilar uñas y dientes al león con esta canción cuando era más jovencito y tadavía estaba menos domado. Al final siempre acababa abatido de un tiro certero de un cazador furtivo: mi padre gritándome que le bajara voz a la música y sobre todo a mí mismo. Catarsis es la palabra.
5 comentarios:
Madre mía, pues no he sacado veces a rugir y a afilar uñas y dientes al león con esta canción cuando era más jovencito y tadavía estaba menos domado. Al final siempre acababa abatido de un tiro certero de un cazador furtivo: mi padre gritándome que le bajara voz a la música y sobre todo a mí mismo.
Catarsis es la palabra.
Me ha gustado mucho el soneto.
Es de un amigo mío muy querido que ya no está entre nosotros. Es aquél que me corregía y me ayudaba cuando comencé a escribir.
Menuda sorpresa. Me hubiera pasado por el de cualquier autor consagrado.
Es muy muy bueno. Voy a buscar uno que me escribió a mí, a ver qué te parece.
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